El ambiente, también conocido como escenario, es el conjunto de elementos físicos, sociales, culturales, históricos y emocionales en los que se desarrolla la acción de una obra narrativa, teatral o incluso poética.
Se puede decir que es el “mundo” en el que se mueven los personajes y ocurren los acontecimientos.
Características del ambiente o escenario
1. Espacial
Se refiere al lugar físico donde transcurren los hechos. Puede ser:
-Real: Un lugar que existe en la vida real, como (Madrid, una selva, un barrio).
-Ficticio: Creado por el autor (Hogwarts, Macondo).
Abierto o cerrado: un campo abierto o un cuarto encerrado.
2. Temporal
Indica cuándo ocurre la historia:
-Época histórica: Edad Media, siglo XX, etc.
-Tiempo del día: mañana, noche.
-Duración de los hechos: unas horas, durante años.
3. Social
Engloba el contexto sociocultural:
-Clase social de los personajes.
-Costumbres, tradiciones, ideologías.
-Nivel económico o educativo.
4. Psicológico o emocional
Es la atmósfera emocional que envuelve la historia:
-Puede ser tensa, alegre, melancólica, etc.
-Refleja el estado anímico de los personajes o el tono general de la obra.
5. Cultural e histórico
Tiene que ver con el contexto más amplio en el que se sitúa la historia:
-Una guerra, una revolución, una época de paz.
-Influye en cómo se comportan los personajes y en los conflictos que enfrentan.
Ejemplo breve:
“Era una noche fría y oscura de invierno, las calles estaban vacías y el viento silbaba entre los edificios abandonados.”
Análisis del ambiente:
Espacial: calles vacías, edificios abandonados.
Temporal: noche, invierno.
Psicológico: atmósfera de soledad o tensión.

Franz Kafka
Fue un escritor checo de origen judío, considerado uno de los autores más influyentes de la literatura del siglo XX. Nació en Praga, entonces parte del Imperio Austrohúngaro, y escribió en alemán. Aunque se formó como abogado, trabajó la mayor parte de su vida en una compañía de seguros, lo que combinaba con su pasión por la escritura.
Su obra, marcada por el absurdo, la burocracia opresiva y la alienación del individuo, incluye títulos emblemáticos como La metamorfosis, El proceso y El castillo. La mayoría de sus escritos fueron publicados póstumamente por su amigo Max Brod, desobedeciendo el deseo de Kafka de que fueran destruidos tras su muerte.
Murió de tuberculosis a los 40 años, dejando un legado literario que influenció profundamente la literatura existencialista y moderna.

La metamorfosis
“Al despertar Gregorio Samsa una mañana, tras un sueño intranquilo, se encontró en su cama convertido en un monstruoso insecto. Estaba echado de espaldas sobre un duro caparazón y, al alzar un poco la cabeza, veía su vientre marrón, convexo, dividido por nervaduras arqueadas, sobre el cual la manta, a punto de escurrirse por completo, apenas se sostenía. Numerosas patas, lastimosamente delgadas en comparación con el grosor del resto, le vibraban desamparadas ante los ojos”.
“La habitación, una habitación humana, tranquila, aunque demasiado pequeña, tenía cuatro paredes desnudas y una puerta cerrada. Sobre la mesa había unas pocas muestras de telas, y en la pared colgaba el retrato de una dama recortado de una revista, enmarcado por Gregorio. El aire estaba viciado, húmedo por el encierro, y el reloj daba las seis y media”.
Este fragmento nos introduce de inmediato en el ambiente claustrofóbico y opresivo de la obra. Kafka sitúa la transformación de Gregorio en el espacio íntimo de su habitación, que aunque es humana y reconocible, se vuelve extraña y angustiante por el contraste con la metamorfosis física que ha sufrido el protagonista. La descripción del espacio —estrecho, cerrado, con paredes desnudas y aire viciado— refuerza el sentimiento de aislamiento, encierro y alienación. El entorno no cambia con la transformación, pero su percepción sí, convirtiendo un espacio doméstico cotidiano en un escenario inquietante.