La violencia volvió a desatarse sin piedad en la costa atlántica. Eran alrededor de las 3:00 de la madrugada del jueves cuando Daniel Laing, de 48 años, fue víctima de un ataque a sangre fría dentro de su propia habitación.
El hecho ocurrió en el edificio Salomón, ubicado entre calle 5 y 6, en la avenida Amador Guerrero, pleno centro de la ciudad de Colón. Mientras dormía, un sujeto ingresó al cuarto y lo apuñaló 33 veces, dejándolo gravemente herido.
A como pudo, fue trasladado de urgencia al Hospital Manuel Amador Guerrero, donde permanece en estado crítico. La víctima trabaja como inspector de la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT) en Colón.
Los familiares de “Dani”, como es conocido en el área, dijeron a las autoridades que no tenía enemigos y que desconocen los motivos detrás del brutal intento de asesinato. “No sabemos quién querría hacerle algo así”, dijeron entre lágrimas.
Este salvaje hecho ocurre en medio de una ola de violencia imparable en la provincia. Solo en lo que va de junio, ya se han registrado ocho homicidios, y la cifra anual asciende a 57 asesinatos en Colón, según conteo extraoficial.
Los colonenses viven con miedo. Muchos exigen al Gobierno acciones urgentes y efectivas para frenar la escalada de crímenes que cada semana cobra nuevas víctimas.