Productores de arroz de Darién y Panamá Este alertan que la producción nacional para el ciclo 2025-2026 está en peligro por falta de pagos atrasados que suman más de 70 millones de dólares. Esta deuda, reclamada al Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), afecta los ciclos agrícolas 2023-2024 y 2024-2025, poniendo en riesgo la siembra futura y aumentando la dependencia de importaciones, lo que podría encarecer el arroz para los consumidores.
Los agricultores, que ya cuentan con la producción asegurada para este año gracias a unas 90,000 hectáreas sembradas, advierten que sin los recursos pendientes no podrán cubrir los costos de producción del próximo ciclo, que rondan los 1,800 dólares por hectárea. Oreste Combe, presidente de la Asociación de Productores de Arroz, expresó la frustración del sector por la falta de cumplimiento de los acuerdos con el ministro Roberto Linares y la urgencia de recibir los pagos para planificar la siembra.
La crisis se suma a una problemática regional que incluye altos costos de insumos, condiciones climáticas adversas y competencia con importaciones. El retraso en los pagos impide a muchos productores cubrir alquileres, comprar insumos y mantener la actividad agrícola, lo que amenaza la seguridad alimentaria y la economía rural en Panamá.
Los productores esperan una pronta respuesta del MIDA para evitar un colapso que podría afectar no solo la producción nacional, sino también el bolsillo de los panameños, que podrían enfrentar un aumento en el precio del arroz si se incrementan las importaciones.