Menores de 25 años, titulares con documentos dañados o vencidos, y quienes necesiten actualizar datos deberán hacer el trámite de manera presencial o por correo. Verifica si estás en la lista antes de iniciar el proceso.
No todos tendrán el camino fácil cuando se trate de renovar el pasaporte en Estados Unidos. Aunque el trámite en línea parecía la alternativa más rápida y cómoda, el gobierno ha cerrado las puertas digitales a varios grupos de personas que ahora deberán armarse de paciencia y hacerlo a la vieja escuela: presencial o por correo postal.
El Departamento de Estado oficializó las nuevas reglas y dejó claro quiénes quedan automáticamente vetados del proceso online:
Ciudadanos menores de 25 años.
Titulares de pasaportes emitidos hace más de 15 años o con menos de 9 años.
Pasaportes dañados, robados o extraviados.
Personas que quieran cambiar datos personales como nombre o género.
Viajeros con salidas programadas en menos de 8 semanas.
Aquellos que no residan en territorio estadounidense.
Si estás en alguna de estas categorías, olvídate de hacerlo desde casa. La página oficial te bloqueará el intento y te redirigirá directo a las opciones tradicionales.
¿Y qué queda por hacer?Dos vías: llenar el formulario DS-82 para enviarlo todo por correo o agendar cita presencial, especialmente si el caso es urgente.
Antes de intentarlo, lo mejor es que verifiques tu elegibilidad en la herramienta oficial en travel.state.gov para evitar sorpresas y retrasos.