Entre lágrimas, rezos y gritos de angustia, las autoridades dominicanas confirmaron el cierre oficial de las labores de rescate tras la tragedia ocurrida en la discoteca Jet Set, donde perdieron la vida al menos 221 personas.
El ambiente en las afueras del local continúa siendo desolador. Decenas de familiares se aferran a la esperanza de encontrar con vida a sus seres queridos, clamando por “un milagro”, mientras los equipos de emergencia concluyen una de las operaciones de búsqueda más complejas de los últimos años.
“Es un dolor que no cabe en el pecho”, expresó una madre que lleva tres días frente a la escena del siniestro esperando noticias de su hija. “Solo pido que me devuelvan su cuerpo”, añadió con la voz quebrada.
En medio de este luto colectivo, el Gobierno dominicano anunció este jueves 11 de abril que se dará inicio a una nueva fase enfocada en la recuperación formal de cadáveres que aún permanecen en el interior de la estructura afectada.
Asimismo, el Ejecutivo informó que una vez completada esta dolorosa etapa, se abrirá una investigación oficial para determinar las causas que originaron el desastre en el emblemático establecimiento nocturno de la capital dominicana.
La discoteca Jet Set, conocida por haber sido un ícono del entretenimiento por décadas, hoy se convierte en símbolo de una tragedia que ha sacudido al país y que, según expertos, marcará un antes y un después en los protocolos de seguridad de locales públicos.