Como toda una leyenda de Hollywood, Nicole Kidman, de 57 años, hizo una entrada triunfal en la MET Gala, dejando a todos boquiabiertos. Aunque su vestido de alta costura firmado por Balenciaga era una obra de arte en sí mismo, no fue la prenda lo que más llamó la atención. La protagonista de Babygirl, deseo prohibido se convirtió en tendencia por su audaz transformación capilar.
Al llegar a la blue carpet del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, Kidman parecía haber optado por un elegante recogido. Sin embargo, al mostrarse de perfil, reveló la verdadera sorpresa: un corte pixie con flequillo lateral ligeramente ondulado, que marcó un giro radical en su estilo habitual.
Como si fuera poco, el nuevo look se completó con una elección de color audaz. La actriz lució un efecto bicolor que combinaba tonos rubios y castaños oscuros, agregando profundidad y un toque vanguardista a su imagen.
El responsable de esta llamativa transformación fue el reconocido estilista Adir Abergel, quien compartió los detalles en su cuenta de Instagram. “La inspiración fue un corte hecho a medida que realzaba la esencia del dandismo de Nicole Kidman. Quería celebrar el tema de este año honrando a los dandis y su individualidad, elegancia y confianza, donde cada detalle está diseñado a la medida de esa persona única”, explicó.
Con esta aparición, Kidman no solo reafirmó su estatus como icono de estilo, sino que demostró, una vez más, su capacidad para reinventarse y seguir sorprendiendo en la cima de la moda y el cine.