¡Benito vuelve al centro de la polémica! Esta vez no por sus letras ni sus outfits, sino por sus decisiones escénicas. La organización internacional PETA (Personas por el Trato Ético de los Animales) denunció que Bad Bunny subió gallinas vivas al escenario durante su residencia musical “No me quiero ir de aquí”, que actualmente se realiza en el Coliseo de Puerto Rico.
“Un ‘baile inolvidable’ para Bad Bunny... pero una pesadilla para los animales”, publicó PETA Latino en su cuenta de Facebook. Y fue más allá: “¿Hasta cuándo los animales serán tratados como simples accesorios para el show de Bad Bunny?”, reclamó la organización.
No es la primera vez que el reguetonero boricua choca con el activismo animal. En 2024, PETA ya lo había criticado por usar un caballo en el escenario durante su gira “The Most Wanted Tour”.
Esta nueva controversia llega en pleno apogeo de su residencia en Puerto Rico, que comenzó el 11 de julio y se extiende hasta el 14 de septiembre, con 30 conciertos completamente agotados. El espectáculo marca un nuevo récord en el Coliseo, superando las 14 funciones que hizo el dúo Wisin y Yandel.
El show, sin duda, es un éxito rotundo para Benito… pero no para los animales, al menos según PETA. La organización le ha pedido públicamente que deje de usar seres vivos como parte de sus presentaciones, acusándolo de “normalizar el maltrato animal en nombre del arte”.
Lo cierto es que, mientras sus fans corean sus éxitos desde las gradas, las gallinas se han robado la atención... y no por su canto.
La gira global de Bad Bunny comenzará oficialmente el 21 de noviembre en República Dominicana y cerrará en Bélgica el 22 de julio de 2026. ¿Seguirán las gallinas acompañándolo por el mundo?
