Pocas horas después de que el presidente José Raúl Mulino anunciara que Panamá sería una de las sedes de la Copa América de Béisbol, este deporte recibió un duro golpe tras conocerse que los manifestantes atacaron las instalaciones del estadio Calvin Byron de Bocas del Toro.
Esto ocurrió en medio de las protestas y cierres de diferentes calles que se dan en la provincia. Las acciones incluyeron el lanzamiento de bombas molotov contra la infraestructura de este coliseo, que es la casa del béisbol de esta provincia.
Dentro del estadio se encontraban agentes de la Policía Nacional, desplegados en la provincia con el objetivo de liberar las vías bloqueadas desde hace más de un mes en la zona de este país.

Este coliseo lleno de historia fue reinaugurado el 24 de enero de 2020, tuvo un costo de 9.1 millones de dólares y fue construido con especificaciones de Grandes Ligas.
Los daños ocasionados a este coliseo son un fuerte golpe para el desarrollo del béisbol en todas sus categorías en esta provincia, en especial la de los atletas que tienen estas instalaciones para elevar su nivel de juego.
Bocas del Toro fue un serio protagonista en la temporada de verano 2025, al quedar entre los mejores ocho equipos en la categoría juvenil, mientras que se coronaron campeones en la mayor. Este fue el cuarto título de la provincia en esta categoría.
“Entendemos el derecho que tienen todos los ciudadanos a manifestarse y expresar su molestia, pero también nos decepciona, porque ese estadio es de toda la provincia, de todo el país”, dijo Miguel Ordóñez, director del Instituto Panameño de Deportes (Pandeportes), en una entrevista a TVN Noticias.
“Casos similares se han tenido como, por ejemplo, en el Toco Castillo, en Veraguas. Llamamos a la comunidad que entienda que tiene todo el derecho de manifestarse y expresar su opinión, pero que los bienes públicos son de todos. Al final del día, nos tocará a nosotros, como entidad regente del deporte, recoger los platos rotos y pagar. Eso será un costo adicional”, añadió.
Cabe mencionar que el equipo dirigido por Audes De León, campeón de la categoría mayor, no pudo disputar sus partidos de local en el Calvin Byron por las protestas y los cierres de la vía.